La distribución de las ventanas grandes llena la casa de luz natural. La luz natural es el signo distintivo de esta casa construida en A Coruña (España). El diseño incluye ventanas grandes para aprovechar al máximo la luminosidad de esta área.
Construido sobre una parcela de tan solo nueve metros de ancho, una casa de tres pisos construida con grandes ventanales que extendía la luz natural por todas las habitaciones. El compromiso de crear un diseño interior brillante se refleja en un tragaluz que atraviesa la casa perpendicularmente, desde el piso superior hasta la sala de estar, que se encuentra en el gran piso, desarrollando un juego geométrico de luces y sombras.
En el interior, la secuencia de espacios abiertos evita los corredores, maximizando el flujo de movimiento alrededor de las habitaciones, todo construido con terrazas. Tener solo un tramo de escaleras, mejora el movimiento entre cada piso.
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El "claroscuro" diseñado por el arquitecto Marcos Samaniego, del estudio Mas Arquitectura, se refleja en el marcado contraste entre las paredes blancas puras y el color negro que podemos encontrar en el piso, cortinas y carpintería. El ambiente luminoso de la casa es un oasis para sus inquilinos.